Elena Pilo, portavoz de la Asociación Bodegas de Logroño, ha pasado por los micrófonos de COPE Rioja con motivo del especial de San Mateo y Fiesta de la Vendimia riojana que emite puntualmente desde la terraza de Restaurante Tondeluna.

Ha compartido espacio con el presidente del Consejo Regulador de la DOCa Rioja, Fernando Ezquerro y juntos han brindado por una excelente cosecha que ya está llegando en gran parte a nuestras bodegas. Elena Pilo además ha resaltado la calidad de las ocho bodegas de Logroño, que suman sinergias y diversidad.

Y mientras Logroño celebra sus fiestas patronales, nuestras bodegas se afanan en la vendimia y visitarlas en estas fechas se convierte en algo mágico y único. Durante cuatro programas se ha destacado la singularidad de las bodegas que componen la enópolis de Logroño.

Bodegas Olarra conocida como la Gran Catedral del Rioja gracias a su emblemático tejado que corona la sala de barricas, formado por 111 cúpulas hexagonales que protegen el vino en su interior o Viña Ijalba con sus visitas copa en mano en época de vendimia. Un recorrido por la bodega mientras se prueba el producto en diferentes puntos del proceso de elaboración. Uvas, mosto, vino desde los depósitos y desde las barricas para terminar con la cata del producto final. Algo singular en la época más bonita de Rioja.

Franco-Españolas, la bodega más polivalente a la que se llega cruzando a pie el puente de hierro desde El Espolón o desde la calle Laurel, y que además de su agenda cultural durante todo el año, cuenta con visitas enoturísticas que te hacen sentir parte de RIOJA, con mayúsculas, Y de ahí a Marqués de Vargas, en la que descubrir, a través de sus visitas privadas, como es una bodega Chateâu al más puro estilo francés, pero en la capital riojana.

Continuamos visitando la más antigua y la más joven de las bodegas logroñesas. Se trata de Marqués de Murrieta y Bodegas Arizcuren. Marqués de Murrieta es un ejemplo de equilibrio entre tradición y vanguardia, siempre con la calidad por bandera. Aquí se esconde el origen de los vinos de Rioja y puede visitarse reservando alguna de sus propuestas enoturísticas que incluyen un recorrido por sus viñedos y visita a la bodega fundacional del S.XIX, Castillo de Igay. Bodegas Arizcuren por su parte, es joven y urbana y recupera la tradición histórica de elaborar vinos en el centro de Logroño mostrando en primera persona la particularidad del trabajo artesano, el envejecimiento en ánforas, fudres o barricas.

A continuación nos trasladamos a Bodegas Ontañón, el templo del vino. Una bodega única donde sus vinos maduran vigilados por dioses y héroes mitológicos en forma de enormes esculturas, vidrieras y pinturas. Y terminamos en Campo Viejo destacando el impresionante proyecto arquitectónico con 45.000 m2 de construcción subterránea en la que se encuentra la sala de barricas, una de las más espectaculares del mundo con 70.000 barricas de roble descansando en un mismo espacio.

La enópolis de Logroño a través de sus ocho bodegas refleja el carácter abierto, cosmopolita e imperdible de la capital riojana capaz de generar conexión entre el turista, la gastronomía, la cultura, el ocio y el vino. Un proyecto integrado en la FER y que cuenta con el apoyo del Gobierno de La Rioja.

¡Aquí el vino es capital!